El Leccionario Dominical de la Iglesia Episcopal (Leccionario Comun Revisado o en ingles RCL) para uso de los lectores de la Iglesia del Redentor en Astoria, Nueva York.

martes, 4 de noviembre de 2008

La Natividad de Ntro. Señor Jesucristo III (RCL)

Colectas: Oh Dios, tú nos alegras anualmente con la festividad del nacimiento de tu único Hijo Jesucristo: Concédenos que, así como le recibimos con júbilo como Redentor, de la misma manera le contemplemos con segura confianza cuando venga a ser nuestro Juez; quien vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.

o la siguiente:

Oh Dios, que has hecho resplandecer esta noche santa con la claridad de la Luz verdadera: Concede a los que hemos conocido el misterio de esa Luz en la tierra, que también nos gocemos de él plenamente, en el cielo; donde vive y reina contigo y el Espíritu santo, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.

o bien:

Omnipotente Dios, tú has dado a tu unigénito Hijo para asumir nuestra naturaleza, y nacer [este día] de una virgen pura: Concede que, siendo nacidos de nuevo y hechos tus hijos por adopción y gracia, seamos renovados cada día con tu Espíritu Santo; mediante nuestro Señor Jesucristo, a quien contigo y el mismo Espíritu sea el honor y la gloria, ahora y por siempre. Amén


 

Isaías 52:7-10 (DHH-CP)

7 ¡Qué hermoso es ver llegar por las colinas al que trae buenas noticias, al que trae noticias de paz, al que anuncia la liberación y dice a Sión: "Tu Dios es rey"! 8 ¡Escucha! Tus centinelas levantan la voz y a una dan gritos de triunfo, porque ven con sus propios ojos cómo vuelve el Señor a Sión. 9 ¡Estallad en gritos de triunfo, ruinas de Jerusalén, porque el Señor ha tenido compasión de su pueblo, ha liberado a Jerusalén! 10 El Señor ha mostrado su poder a la vista de todas las naciones. Por toda la tierra se sabrá que nuestro Dios nos ha salvado.


 

Salmo 98 Cantate Domino

1 Canten al Señor cántico nuevo, *

porque ha hecho maravillas.

2 Con su diestra, y con su santo brazo, *

ha alcanzado la victoria.

3 El Señor ha dado a conocer su victoria; *

a la vista de las naciones ha descubierto su justicia.

4 Se acuerda de su misericordia y su fidelidad para con la casa de Israel; *

los confines de la tierra han visto la victoria de nuestro Dios.

5 Aclamen con júbilo al Señor, pueblos todos; *

levanten la voz, gócense y canten.

6 Canten al Señor con el arpa, *

con el arpa y la voz de cántico.

7 Con trompetas y al son de clarines, *

aclamen con júbilo ante el Rey, el Señor.

8 Ruja el mar y cuanto contiene, *

el mundo y los que en él habitan.

9 Den palmadas los ríos, aclamen los montes al Señor, *

cuando llegue para juzgar la tierra.

10 Juzgará al mundo con justicia, *

y a los pueblos con equidad.


 

Hebreos 1:1-12 (DHH-CP)

1 En otros tiempos habló Dios a nuestros antepasados muchas veces y de muchas maneras por medio de los profetas. 2 Ahora, en estos tiempos últimos, nos ha hablado por su Hijo, mediante el cual creó los mundos y al cual ha hecho heredero de todas las cosas. 3 Él es el resplandor glorioso de Dios, la imagen misma del ser de Dios; y es él quien sostiene todas las cosas con su palabra poderosa. Después de limpiarnos de nuestros pecados se ha sentado en el cielo, a la derecha del trono de Dios. 4 Así el Hijo de Dios ha llegado a ser superior a los ángeles, pues ha recibido en herencia un título mucho más alto que el de ellos. 5 Porque Dios nunca dijo a ningún ángel: "Tú eres mi Hijo, yo te he engendrado hoy." Ni tampoco dijo de ningún ángel: "Yo seré un padre para él y él será un hijo para mí." 6 En cambio, en otro lugar, al presentar a su Hijo primogénito en el mundo, ordena: "Que todos los ángeles de Dios lo adoren." 7 Dios dice respecto de los ángeles: "Hace que sus ángeles sean como vientos y como llamas de fuego sus servidores." 8 Pero respecto del Hijo afirma: "Tu reinado, oh Dios, es eterno y es un reinado de justicia. 9 Has amado lo bueno y odiado lo malo; por eso te ha escogido Dios, tu Dios, y te ha colmado de alegría más que a tus compañeros." 10 También dice: "Tú, oh Señor, afirmaste la tierra desde el principio; tú mismo hiciste el cielo. 11 Todo ello dejará de ser, pero tú permaneces para siempre. Todo ello se envejecerá como la ropa, 12 ¡lo doblarás como se dobla un vestido, lo cambiarás como quien se cambia de ropa! Pero tú eres el mismo, tu vida no tiene fin."


 

Juan 1:1-14 (DHH-CP)

1 En el principio ya existía la Palabra, y aquel que es la Palabra estaba con Dios y era Dios. 2 Él estaba en el principio con Dios. 3 Por medio de él, Dios hizo todas las cosas; nada de lo que existe fue hecho sin él. 4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de la humanidad. 5 Esta luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no han podido apagarla. 6 Hubo un hombre llamado Juan, a quien Dios envió 7 como testigo, para que diera testimonio de la luz y para que todos creyesen por medio de él. 8 Juan no era la luz, sino uno enviado a dar testimonio de la luz. 9 La luz verdadera que alumbra a toda la humanidad venía a este mundo. 10 Aquel que es la Palabra estaba en el mundo, y aunque Dios había hecho el mundo por medio de él, los que son del mundo no le reconocieron. 11 Vino a su propio mundo, pero los suyos no le recibieron. 12 Pero a quienes le recibieron y creyeron en él les concedió el privilegio de llegar a ser hijos de Dios. 13 Y son hijos de Dios, no por la naturaleza ni los deseos humanos, sino porque Dios los ha engendrado. 14 Aquel que es la Palabra se hizo hombre y vivió entre nosotros lleno de amor y de verdad. Y hemos visto su gloria, la gloria que como Hijo único recibió del Padre.


 

[1]

[1] Sociedades Bíblicas Unidas, & Sociedad Bíblica de España. (2002; 2003). Dios habla hoy - Edición interconfesional de estudio (castellano peninsular); Dios habla hoy (castellano peninsular). Sociedade Bíblica do Brasil.