El Leccionario Dominical de la Iglesia Episcopal (Leccionario Comun Revisado o en ingles RCL) para uso de los lectores de la Iglesia del Redentor en Astoria, Nueva York.

martes, 18 de noviembre de 2008

Primer Domingo después de la Epifanía “El Bautismo de Cristo”,,Año B, RCL

Colecta: Padre celestial, que en el bautismo de Jesús en el Río Jordán, le proclamaste tu Hijo amado y le ungiste con el Espíritu Santo: Concede que todos los que son bautizados en su Nombre, guarden el pacto que han hecho, y valerosamente le confiesen como Señor y Salvador; quien contigo y el Espíritu Santo vive y reina, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.

Lector(a): Una lectura del Libro de Génesis


Génesis 1:1-5 (DHH)

1 En el comienzo de todo, Dios creó el cielo y la tierra. 2 La tierra no tenía entonces ninguna forma; todo era un mar profundo cubierto de oscuridad, y el espíritu de Dios se movía sobre el agua. 3 Entonces Dios dijo: "¡Que haya luz!" Y hubo luz. 4 Al ver Dios que la luz era buena, la separó de la oscuridad 5 y la llamó "día", y a la oscuridad la llamó "noche". De este modo se completó el primer día.

Lector(a): Palabra de Dios


Lector(a): Lectura alternada del Salmo 29, el pueblo responderá lo que esta en negrillas

Psalm 29

Afferte Domino

1 Den al Señor, oh seres celestiales, *

den al Señor la gloria y la fortaleza.

2 Den al Señor la gloria debida a su Nombre; *

adoren al Señor en la hermosura de su santidad.

3 La voz del Señor sobre las aguas; truena el Dios de gloria; *

el Señor sobre las grandes aguas.

4 La voz del Señor es voz potente; *

la voz del Señor es voz gloriosa.

5 La voz del Señor quebranta los cedros; *

el Señor quebranta los cedros del Líbano.

6 Hace saltar al Líbano como becerro, *

al Hermón como hijuelo de búfalo.

7 La voz del Señor divide las llamas de fuego; la voz del Señor hace temblar el desierto; *

hace temblar el Señor el desierto de Cades.

8 La voz del Señor tuerce las encinas, *

y desnuda los bosques.

9 Mientras, en el templo del Señor *

todo proclama su gloria.

10 El Señor se sienta por encima del diluvio; *

el Señor se sienta como Rey por siempre jamás.

11 El Señor dará fortaleza a su pueblo; *

el Señor bendecirá a su pueblo con la paz.

Lector(a): Gloria al Padre al Hijo y al Espíritu Santo


Lector(a): Lectura del Libro de Hechos de los Apóstoles


Hechos 19:1-7 (DHH)

1 Mientras Apolo estaba en Corinto, Pablo cruzó la región montañosa y llegó a Éfeso, donde encontró a varios creyentes. 2 Les preguntó: —¿Recibieron ustedes el Espíritu Santo cuando se hicieron creyentes? Ellos le contestaron: —Ni siquiera habíamos oído hablar del Espíritu Santo. 3 Pablo les preguntó: —Pues ¿qué bautismo recibieron ustedes? Y ellos respondieron: —El bautismo de Juan. 4 Pablo les dijo: —Sí, Juan bautizaba a los que se volvían a Dios, pero les decía que creyeran en el que vendría después de él, es decir, en Jesús. 5 Al oir esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús; 6 y cuando Pablo les impuso las manos, también vino sobre ellos el Espíritu Santo, y hablaban en lenguas extrañas, y comunicaban mensajes proféticos. 7 Eran entre todos unos doce hombres.


Lector(a): Palabra de Dios


El Santo + Evangelio + de Nuestro Señor + Jesucristo según San Marcos


Marcos 1:4-11 (DHH)

4 Y así se presentó Juan el Bautista en el desierto; decía a todos que debían volverse a Dios y ser bautizados, para que Dios les perdonara sus pecados. 5 Todos los de la región de Judea y de la ciudad de Jerusalén salían a oírlo. Confesaban sus pecados, y Juan los bautizaba en el río Jordán. 6 La ropa de Juan estaba hecha de pelo de camello, y se la sujetaba al cuerpo con un cinturón de cuero; y comía langostas y miel del monte. 7 En su proclamación decía: "Después de mí viene uno más poderoso que yo, que ni siquiera merezco agacharme para desatarle la correa de sus sandalias. 8 Yo los he bautizado a ustedes con agua; pero él los bautizará con el Espíritu Santo." 9 Por aquellos días, Jesús salió de Nazaret, que está en la región de Galilea, y Juan lo bautizó en el Jordán. 10 En el momento de salir del agua, Jesús vio que el cielo se abría y que el Espíritu bajaba sobre él como una paloma. 11 Y se oyó una voz del cielo, que decía: "Tú eres mi Hijo amado, a quien he elegido."


El Evangelio del Señor


El texto de los salmos es tomado del Libro de Oración Común 1979 La Iglesia Episcopal. Las lecturas bíblicas son tomadas de La Biblia de estudio : Dios habla hoy. 1998 (electronic ed.). Miami: Sociedades Bíblicas Unidas. Las lecturas del Antiguo Testamento pueden tener un texto alterno con su propio salmo. Texto encerrado en [ ] es opcional. Texto en { } para hacer claro el texto que sigue.

Enero 6: La Epifanía o La Manifestación de Cristo a los Gentiles, Año B, RCL

Colecta: Oh Dios, que por la guía de una estrella manifestaste tu único Hijo a los pueblos de la tierra: Guía a tu presencia a los que ahora te conocemos por fe, para que veamos tu gloria cara a cara; mediante Jesucristo nuestro Señor, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.


Lector(a): Una lectura del Libro de Isaiah 60:1-6 (DHH)


Isaías 60:1-6 (DHH)

1 Levántate, Jerusalén, envuelta en resplandor, porque ha llegado tu luz y la gloria del Señor brilla sobre ti. 2 La oscuridad cubre la tierra, la noche envuelve a las naciones, pero el Señor brillará sobre ti y sobre ti aparecerá su gloria. 3 Las naciones vendrán hacia tu luz, los reyes vendrán hacia el resplandor de tu amanecer. 4 Levanta los ojos, y mira a tu alrededor: todos se reúnen y vienen hacia ti. Tus hijos vendrán desde lejos; tus hijas serán traídas en brazos. 5 Tú, al verlos, estarás radiante de alegría, tu corazón se llenará de gozo; te traerán los tesoros de los países del mar, te entregarán las riquezas de las naciones. 6 Te verás cubierta de caravanas de camellos que vienen de Madián y de Efá; vendrán todos los de Sabá, cargados de oro y de incienso, y proclamarán las acciones gloriosas del Señor.


Lector(a): Palabra de Dios


[1] La Bibla de estudio : Dios habla hoy. 1998 (electronic ed.). Miami: Sociedades Bi´iblicas Unidas.


Lector(a): Lectura alternada del Salmo 72, el pueblo responderá lo que esta en negrillas

Deus, judicium

1 Oh Dios, da tu juicio al Rey, *

y tu justicia al Hijo del Rey;

2 Para que rija a tu pueblo con justicia, *

y a tus pobres con juicio;

3 Para que los montes traigan prosperidad a tu pueblo, *

y los collados justicia.

4 Defenderá a los necesitados del pueblo; *

rescatará a los pobres y aplastará al opresor.

5 Vivirá mientras duren el sol y la luna, *

de generación en generación.

6 Descenderá como el agua sobre el campo segado, *

como la lluvia que empapa la tierra seca.

7 En aquel día florecerán los justos, *

y habrá abundancia de paz, hasta que no haya luna.

10 Los reyes de Tarsis y de las islas le pagarán tributos, *

y los reyes de Sabá y de Arabia le ofrecerán dones.

11 Todos los reyes se postrarán delante de él, *

y todas las naciones le servirán;

12 Porque él librará al pobre que clamare, *

y al oprimido que no tuviere quien le socorra.

13 Tendrá compasión de los humildes y de los menesterosos; *

salvará la vida de los necesitados.

14 De opresión y violencia redimirá sus vidas, *

y la sangre de ellos será preciosa a sus ojos.


Lector(a): Gloria al Padre al Hijo y al Espíritu Santo


Lector(a): Lectura de la Carta del Apóstol San Pablo a los Efesios


Efesios 3:1-12

1 Por esta razón yo, Pablo, estoy preso por causa de Cristo Jesús para bien de ustedes, los que no son judíos. 2 Pues ya sin duda sabrán que Dios me ha encargado anunciar a ustedes lo que él, en su bondad, ha dispuesto. 3 Por revelación he conocido el designio secreto de Dios, como ya les escribí brevemente. 4 Al leerlo, pueden darse cuenta de que conozco este designio secreto realizado en Cristo, 5 que no se dio a conocer a nadie en otros tiempos, pero que ahora Dios ha revelado a sus santos apóstoles y profetas por medio de su Espíritu. 6 El designio secreto es este: que por el evangelio Dios llama a todas las naciones a participar, en Cristo Jesús, de la misma herencia, del mismo cuerpo y de la misma promesa que el pueblo de Israel. 7 Y yo he sido puesto al servicio de este mensaje por la bondad y la misericordia que Dios ha tenido conmigo, quien ha mostrado así su gran poder. 8 Yo soy menos que el más pequeño de todos los que pertenecen al pueblo santo; pero él me ha concedido este privilegio de anunciar a los no judíos la buena noticia de las incontables riquezas de Cristo. 9 Y me ha encargado hacerles ver a todos cuál es la realización de ese designio que Dios, creador de todas las cosas, había mantenido secreto desde la eternidad. 10 De esta manera ahora, por medio de la iglesia, todos los poderes y autoridades en el cielo podrán conocer la sabiduría de Dios, que se muestra en tan variadas formas. 11 Dios hizo esto de acuerdo con el plan eterno que llevó a cabo en Cristo Jesús nuestro Señor. 12 Y en Cristo tenemos libertad para acercarnos a Dios, con la confianza que nos da nuestra fe en él.


Lector(a): Palabra de Dios

[1] La Bibla de estudio : Dios habla hoy. 1998 (electronic ed.). Miami: Sociedades Bi´iblicas Unidas.


El Santo + Evangelio + de Nuestro Señor + Jesucristo según San Mateo


Mateo 2:1-12 (DHH)

1 Jesús nació en Belén, un pueblo de la región de Judea, en el tiempo en que Herodes era rey del país. Llegaron por entonces a Jerusalén unos sabios del Oriente que se dedicaban al estudio de las estrellas, 2 y preguntaron: —¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos salir su estrella y hemos venido a adorarlo. 3 El rey Herodes se inquietó mucho al oir esto, y lo mismo les pasó a todos los habitantes de Jerusalén. 4 Mandó el rey llamar a todos los jefes de los sacerdotes y a los maestros de la ley, y les preguntó dónde había de nacer el Mesías. 5 Ellos le dijeron: —En Belén de Judea; porque así lo escribió el profeta: 6 'En cuanto a ti, Belén, de la tierra de Judá, no eres la más pequeña entre las principales ciudades de esa tierra; porque de ti saldrá un gobernante que guiará a mi pueblo Israel.' 7 Entonces Herodes llamó en secreto a los sabios, y se informó por ellos del tiempo exacto en que había aparecido la estrella. 8 Luego los mandó a Belén, y les dijo: —Vayan allá, y averigüen todo lo que puedan acerca de ese niño; y cuando lo encuentren, avísenme, para que yo también vaya a rendirle homenaje. 9 Con estas indicaciones del rey, los sabios se fueron. Y la estrella que habían visto salir iba delante de ellos, hasta que por fin se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño. 10 Cuando los sabios vieron la estrella, se alegraron mucho. 11 Luego entraron en la casa, y vieron al niño con María, su madre; y arrodillándose le rindieron homenaje. Abrieron sus cofres y le ofrecieron oro, incienso y mirra. 12 Después, advertidos en sueños de que no debían volver a donde estaba Herodes, regresaron a su tierra por otro camino.


El Evangelio del Señor

El texto de los salmos es tomado del Libro de Oracion Comun 1979 La Iglesia Episcopal. Todos las lecturas del Antiguo Testamento tiene un texto alterno con su propio salmo. Texto encerrado en [ ] es opcional. Texto en { } para hacer claro el texto que sigue.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Segundo Domingo después de Navidad, Año B, RCL

Colecta: Oh Dios, que maravillosamente creaste y aún más maravillosamente restauraste la dignidad de la naturaleza humana: Concede que compartamos la vida divina de quien se humilló para compartir nuestra humanidad, tu Hijo Jesucristo; que vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

Lector(a): Una lectura del Libro de Jeremías

Jeremías 31:7-14

7 El Señor dice: “Canten de gozo y alegría por el pueblo de Jacob, la principal entre todas las naciones. Hagan oir sus alabanzas y digan: ‘El Señor salvó a su pueblo, lo que quedaba de Israel.’ 8 Voy a hacerlos volver del país del norte, y a reunirlos del último rincón del mundo. Con ellos vendrán los ciegos y los cojos, las mujeres embarazadas y las que ya dieron a luz; ¡volverá una enorme multitud! 9 Vendrán orando y llorando. Yo los llevaré a corrientes de agua, por un camino llano, donde no tropiecen. Pues soy el padre de Israel, y Efraín es mi hijo mayor. 10 “Naciones, escuchen la palabra del Señor y anuncien en las costas lejanas: ‘El Señor dispersó a Israel, pero lo reunirá y lo cuidará como cuida el pastor a sus ovejas.’ 11 Porque el Señor rescató al pueblo de Jacob, lo libró de una nación más poderosa. 12 “Vendrán y cantarán de alegría en lo alto de Sión, se deleitarán con los beneficios del Señor: el trigo, el vino y el aceite, las ovejas y las reses. Serán como una huerta bien regada, y no volverán a perder las fuerzas. 13 Las muchachas bailarán alegremente, lo mismo que los jóvenes y los viejos. Yo les daré consuelo: convertiré su llanto en alegría, y les daré una alegría mayor que su dolor. 14 Haré que los sacerdotes coman los mejores alimentos y que mi pueblo disfrute en abundancia de mis bienes. Yo, el Señor, lo afirmo.”

Lector(a): Palabra de Dios

Lector(a): Lectura alternada del Salmo 84, el pueblo responderá lo que esta en negrillas


Salmo 84 or 84:1-8

Salmo 84 Quam dilecta!
1 ¡Cuán amable tu morada, Señor de los Ejércitos! *
Anhela mi alma y con ardor desea los atrios del Señor; mi corazón y mi carne se regocijan en el Dios vivo.

2 El gorrión ha encontrado casa, y la golondrina nido donde poner sus polluelos: *
en tus altares, oh Señor de los Ejércitos, Rey mío y Dios mío.

3 ¡Dichosos los que habitan en tu casa! *
Perpetuamente te alabarán.

4 ¡Dichosos los que en ti encuentran su fuerza, *
cuyos corazones están resueltos a peregrinar!

5 Los que atraviesan el valle desolado lo hallan un lugar de fuentes, *
porque la lluvia temprana lo ha cubierto de charcos.

6 Treparán de baluarte en baluarte, *
y se revelará el Dios de los dioses en Sión.

7 Señor Dios de los Ejércitos, escucha mi oración; *
atiéndeme, oh Dios de Jacob.

8 Mira, oh Dios, a nuestro Escudo; *
pon los ojos en el rostro de tu Ungido.

[9 Mejor es pasar un día en tus atrios que mil en mi propia casa; *
vale más estar en el umbral de la casa de mi Dios, que vivir en las tiendas de los malvados;

10 Porque sol y escudo es el Señor Dios; *
él dará la gracia y la gloria.

11 No quitará el Señor ningún bien *
a los que andan en integridad.

12 ¡Oh Señor de los Ejércitos, *
dichosos los que en ti confían!]

Lector(a): Lectura de la Carta del Apóstol San Pablo a los Efesios


Efesios 1:3-6,15-19a

"Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, pues en Cristo nos ha bendecido en los cielos con toda clase de bendiciones espirituales. Dios nos escogió en Cristo desde antes de la creación del mundo, para que fuéramos santos y sin defecto en su presencia. Por su amor, nos había destinado a ser adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo, hacia el cual nos ordenó, según la determinación bondadosa de su voluntad. Esto lo hizo para que alabemos siempre a Dios por su gloriosa bondad, con la cual nos bendijo mediante su amado Hijo." "Por esto, como sé que ustedes tienen fe en el Señor Jesús y amor para con todo el pueblo santo, no dejo de dar gracias a Dios por ustedes, recordándolos en mis oraciones. Pido al Dios de nuestro Señor Jesucristo, al glorioso Padre, que les conceda el don espiritual de la sabiduría y se manifieste a ustedes, para que puedan conocerlo verdaderamente. Pido que Dios les ilumine la mente, para que sepan cuál es la esperanza a la que han sido llamados, cuán gloriosa y rica es la herencia que Dios da al pueblo santo, y cuán grande y sin límites es su poder, el cual actúa en nosotros los creyentes. Este poder es el mismo que Dios mostró con tanta fuerza y potencia"

Lector(a): Palabra de Dios

El Santo + Evangelio + de Nuestro Señor + Jesucristo según San Mateo

Mateo 2:13-15,19-23
"Cuando ya los sabios se habían ido, un ángel del Señor se le apareció en sueños a José, y le dijo: “Levántate, toma al niño y a su madre, y huye a Egipto. Quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.” José se levantó, tomó al niño y a su madre, y salió con ellos de noche camino de Egipto, donde estuvieron hasta que murió Herodes. Esto sucedió para que se cumpliera lo que el Señor había dicho por medio del profeta: “De Egipto llamé a mi Hijo.”" "Pero después que murió Herodes, un ángel del Señor se le apareció en sueños a José, en Egipto, y le dijo: “Levántate, toma contigo al niño y a su madre, y regresa a Israel, porque ya han muerto los que querían matar al niño.” Entonces José se levantó y llevó al niño y a su madre a Israel. Pero cuando supo que Arquelao estaba gobernando en Judea en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allá; y habiendo sido advertido en sueños por Dios, se dirigió a la región de Galilea. Al llegar, se fue a vivir al pueblo de Nazaret. Esto sucedió para que se cumpliera lo que dijeron los profetas: que Jesús sería llamado nazareno."

El Evangelio del Señor

o esta

El Santo + Evangelio + de Nuestro Señor + Jesucristo según San Lucas

Lucas 2:41-52
"Los padres de Jesús iban todos los años a Jerusalén para la fiesta de la Pascua. Y así, cuando Jesús cumplió doce años, fueron allá todos ellos, como era costumbre en esa fiesta. Pero pasados aquellos días, cuando volvían a casa, el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que sus padres se dieran cuenta. Pensando que Jesús iba entre la gente, hicieron un día de camino; pero luego, al buscarlo entre los parientes y conocidos, no lo encontraron. Así que regresaron a Jerusalén para buscarlo allí. Al cabo de tres días lo encontraron en el templo, sentado entre los maestros de la ley, escuchándolos y haciéndoles preguntas. Y todos los que lo oían se admiraban de su inteligencia y de sus respuestas. Cuando sus padres lo vieron, se sorprendieron; y su madre le dijo: —Hijo mío, ¿por qué nos has hecho esto? Tu padre y yo te hemos estado buscando llenos de angustia. Jesús les contestó: —¿Por qué me buscaban? ¿No sabían que tengo que estar en la casa de mi Padre? Pero ellos no entendieron lo que les decía. Entonces volvió con ellos a Nazaret, donde vivió obedeciéndolos en todo. Su madre guardaba todo esto en su corazón. Y Jesús seguía creciendo en sabiduría y estatura, y gozaba del favor de Dios y de los hombres."

El Evangelio del Señor


O esta

El Santo + Evangelio + de Nuestro Señor + Jesucristo según San Mateo

Mateo 2:1-12
"Jesús nació en Belén, un pueblo de la región de Judea, en el tiempo en que Herodes era rey del país. Llegaron por entonces a Jerusalén unos sabios del Oriente que se dedicaban al estudio de las estrellas, y preguntaron: —¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos salir su estrella y hemos venido a adorarlo. El rey Herodes se inquietó mucho al oir esto, y lo mismo les pasó a todos los habitantes de Jerusalén. Mandó el rey llamar a todos los jefes de los sacerdotes y a los maestros de la ley, y les preguntó dónde había de nacer el Mesías. Ellos le dijeron: —En Belén de Judea; porque así lo escribió el profeta: ‘En cuanto a ti, Belén, de la tierra de Judá, no eres la más pequeña entre las principales ciudades de esa tierra; porque de ti saldrá un gobernante que guiará a mi pueblo Israel.’ Entonces Herodes llamó en secreto a los sabios, y se informó por ellos del tiempo exacto en que había aparecido la estrella. Luego los mandó a Belén, y les dijo: —Vayan allá, y averigüen todo lo que puedan acerca de ese niño; y cuando lo encuentren, avísenme, para que yo también vaya a rendirle homenaje. Con estas indicaciones del rey, los sabios se fueron. Y la estrella que habían visto salir iba delante de ellos, hasta que por fin se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño. Cuando los sabios vieron la estrella, se alegraron mucho. Luego entraron en la casa, y vieron al niño con María, su madre; y arrodillándose le rindieron homenaje. Abrieron sus cofres y le ofrecieron oro, incienso y mirra. Después, advertidos en sueños de que no debían volver a donde estaba Herodes, regresaron a su tierra por otro camino."

El Evangelio del Señor

Primer Domingo después de Navidad

Colecta:
Dios todopoderoso, tú has derramado sobre nosotros la nueva luz de tu Verbo encarnado: Concede que esta luz, que arde en nuestro corazón, resplandezca en nuestra vida; mediante nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.

Este domingo tiene preferencia sobre las tres conmemoraciones que siguen al Día de Navidad. Si fuera necesario, la observancia de una, dos o todas ellas ha de ser pospuesta un día.

Lector(a): Una lectura del Libro de Isaías

Isaías 61:10-62:3

10 ¡Cómo me alegro en el Señor! Me lleno de gozo en mi Dios, porque me ha brindado su salvación, ¡me ha cubierto de victoria! Soy como un novio que se pone su corona o una novia que se adorna con sus joyas. 11 Porque así como nacen las plantas de la tierra y brotan los retoños en un jardín, así hará el Señor que brote su victoria y que todas las naciones entonen cantos de alabanza. 1 Por amor a ti, Sión, no me quedaré callado; por amor a ti, Jerusalén, no descansaré hasta que tu victoria brille como el amanecer y tu salvación como una antorcha encendida. 2 Las naciones verán tu salvación, todos los reyes verán tu gloria. Entonces tendrás un nombre nuevo que el Señor mismo te dará. 3 Tú serás una hermosa corona real en la mano del Señor tu Dios.

Lector(a): Palabra de Dios

Lector(a): Lectura alternada del Salmo 147, el pueblo responderá lo que esta en negrillas

Psalm 147 or 147:13-21
Laudate Dominum

Psalm 147 or 147:13-21
Laudate Dominum

1 ¡Aleluya! ¡Cuán bueno es cantar alabanzas a nuestro Dios! *
¡Cuán agradable es honrarle con loores!

2 El Señor reconstruye Jerusalén; *
a los desterrados de Israel recoge.

3 El sana a los quebrantados de corazón, *
y venda sus heridas.

4 Cuenta el número de las estrellas; *
a todas ellas llama por su nombre.

5 Grande es el Señor nuestro, incomparable su poder, *
infinita su sabiduría.

6 El Señor levanta a los humildes, *
mas humilla hasta el polvo a los malvados.

7 Canten al Señor con acción de gracias; *
toquen el arpa a nuestro Dios.

8 El cubre los cielos de nubes, *
y prepara la lluvia para la tierra;

9 Hace brotar la hierba en los montes, *
y plantas verdes para la humanidad.

10 Da alimento a los ganados, *
y a las crías de cuervo que graznan.

11 No se deleita en el vigor del caballo, *
ni se complace en la fortaleza del hombre.

12 Se complace el Señor en los que le veneran, *
en los que confían en su gracia y favor.

13 Glorifica al Señor, oh Jerusalén; *
alaba a tu Dios, oh Sión;

14 Porque ha fortalecido los cerrojos de tus puertas; *
ha bendecido a tus hijos dentro de ti.

15 Ha establecido la paz en tus fronteras; *
te sacia con lo mejor del trigo.

16 El envía su decreto a la tierra, *
y su palabra corre veloz.

17 Despliega la nieve como lana; *
derrama la escarcha como ceniza.

18 Esparce su granizo como migajas; *
ante su frío, ¿quién resistirá?

19 Envía su palabra, y se derriten; *
sopla su viento, y corren las aguas.

20 Declara su palabra a Jacob, *
sus estatutos y sus juicios a Israel.

21 No ha tratado así a ninguna otra nación, *
ni les ha dado a conocer sus mandatos. Aleluya !

Lector(a): Lectura de la Carta del Apóstol San Pablo a los Gálatas

Gálatas 3:23-25;4:4-7

23 Antes de venir la fe, la ley nos tenía presos, esperando a que la fe fuera dada a conocer. 24 La ley era para nosotros como el esclavo que vigila a los niños, hasta que viniera Cristo, para que por la fe obtuviéramos la justicia. 25 Pero ahora que ha llegado la fe, ya no estamos a cargo de ese esclavo que era la ley, 4 Pero cuando se cumplió el tiempo, Dios envió a su Hijo, que nació de una mujer, sometido a la ley de Moisés, 5 para rescatarnos a los que estábamos bajo esa ley y concedernos gozar de los derechos de hijos de Dios. 6 Y porque ya somos sus hijos, Dios mandó el Espíritu de su Hijo a nuestros corazones; y el Espíritu clama: “¡Abbá! ¡Padre!” 7 Así pues, tú ya no eres esclavo, sino hijo de Dios; y por ser hijo suyo, es voluntad de Dios que seas también su heredero.

Lector(a): Palabra de Dios

El Santo + Evangelio + de Nuestro Señor + Jesucristo según San Juan

Juan 1:1-18
1 En el principio ya existía la Palabra; y aquel que es la Palabra estaba con Dios y era Dios. 2 Él estaba en el principio con Dios. 3 Por medio de él, Dios hizo todas las cosas; nada de lo que existe fue hecho sin él. 4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de la humanidad. 5 Esta luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no han podido apagarla. 6 Hubo un hombre llamado Juan, a quien Dios envió 7 como testigo, para que diera testimonio de la luz y para que todos creyeran por lo que él decía. 8 Juan no era la luz, sino uno enviado a dar testimonio de la luz. 9 La luz verdadera que alumbra a toda la humanidad venía a este mundo. 10 Aquel que es la Palabra estaba en el mundo; y, aunque Dios hizo el mundo por medio de él, los que son del mundo no lo reconocieron. 11 Vino a su propio mundo, pero los suyos no lo recibieron. 12 Pero a quienes lo recibieron y creyeron en él, les concedió el privilegio de llegar a ser hijos de Dios. 13 Y son hijos de Dios, no por la naturaleza ni los deseos humanos, sino porque Dios los ha engendrado. 14 Aquel que es la Palabra se hizo hombre y vivió entre nosotros. Y hemos visto su gloria, la gloria que recibió del Padre, por ser su Hijo único, abundante en amor y verdad. 15 Juan dio testimonio de él, diciendo: “Este es aquel a quien yo me refería cuando dije que el que viene después de mí es más importante que yo, porque existía antes que yo.” 16 De su abundancia todos hemos recibido un don en vez de otro; 17 porque la ley fue dada por medio de Moisés, pero el amor y la verdad se han hecho realidad por medio de Jesucristo. 18 Nadie ha visto jamás a Dios; el Hijo único, que es Dios y que vive en íntima comunión con el Padre, es quien nos lo ha dado a conocer.

El Evangelio del Señor

martes, 4 de noviembre de 2008

La Natividad de Ntro. Señor Jesucristo III (RCL)

Colectas: Oh Dios, tú nos alegras anualmente con la festividad del nacimiento de tu único Hijo Jesucristo: Concédenos que, así como le recibimos con júbilo como Redentor, de la misma manera le contemplemos con segura confianza cuando venga a ser nuestro Juez; quien vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.

o la siguiente:

Oh Dios, que has hecho resplandecer esta noche santa con la claridad de la Luz verdadera: Concede a los que hemos conocido el misterio de esa Luz en la tierra, que también nos gocemos de él plenamente, en el cielo; donde vive y reina contigo y el Espíritu santo, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.

o bien:

Omnipotente Dios, tú has dado a tu unigénito Hijo para asumir nuestra naturaleza, y nacer [este día] de una virgen pura: Concede que, siendo nacidos de nuevo y hechos tus hijos por adopción y gracia, seamos renovados cada día con tu Espíritu Santo; mediante nuestro Señor Jesucristo, a quien contigo y el mismo Espíritu sea el honor y la gloria, ahora y por siempre. Amén


 

Isaías 52:7-10 (DHH-CP)

7 ¡Qué hermoso es ver llegar por las colinas al que trae buenas noticias, al que trae noticias de paz, al que anuncia la liberación y dice a Sión: "Tu Dios es rey"! 8 ¡Escucha! Tus centinelas levantan la voz y a una dan gritos de triunfo, porque ven con sus propios ojos cómo vuelve el Señor a Sión. 9 ¡Estallad en gritos de triunfo, ruinas de Jerusalén, porque el Señor ha tenido compasión de su pueblo, ha liberado a Jerusalén! 10 El Señor ha mostrado su poder a la vista de todas las naciones. Por toda la tierra se sabrá que nuestro Dios nos ha salvado.


 

Salmo 98 Cantate Domino

1 Canten al Señor cántico nuevo, *

porque ha hecho maravillas.

2 Con su diestra, y con su santo brazo, *

ha alcanzado la victoria.

3 El Señor ha dado a conocer su victoria; *

a la vista de las naciones ha descubierto su justicia.

4 Se acuerda de su misericordia y su fidelidad para con la casa de Israel; *

los confines de la tierra han visto la victoria de nuestro Dios.

5 Aclamen con júbilo al Señor, pueblos todos; *

levanten la voz, gócense y canten.

6 Canten al Señor con el arpa, *

con el arpa y la voz de cántico.

7 Con trompetas y al son de clarines, *

aclamen con júbilo ante el Rey, el Señor.

8 Ruja el mar y cuanto contiene, *

el mundo y los que en él habitan.

9 Den palmadas los ríos, aclamen los montes al Señor, *

cuando llegue para juzgar la tierra.

10 Juzgará al mundo con justicia, *

y a los pueblos con equidad.


 

Hebreos 1:1-12 (DHH-CP)

1 En otros tiempos habló Dios a nuestros antepasados muchas veces y de muchas maneras por medio de los profetas. 2 Ahora, en estos tiempos últimos, nos ha hablado por su Hijo, mediante el cual creó los mundos y al cual ha hecho heredero de todas las cosas. 3 Él es el resplandor glorioso de Dios, la imagen misma del ser de Dios; y es él quien sostiene todas las cosas con su palabra poderosa. Después de limpiarnos de nuestros pecados se ha sentado en el cielo, a la derecha del trono de Dios. 4 Así el Hijo de Dios ha llegado a ser superior a los ángeles, pues ha recibido en herencia un título mucho más alto que el de ellos. 5 Porque Dios nunca dijo a ningún ángel: "Tú eres mi Hijo, yo te he engendrado hoy." Ni tampoco dijo de ningún ángel: "Yo seré un padre para él y él será un hijo para mí." 6 En cambio, en otro lugar, al presentar a su Hijo primogénito en el mundo, ordena: "Que todos los ángeles de Dios lo adoren." 7 Dios dice respecto de los ángeles: "Hace que sus ángeles sean como vientos y como llamas de fuego sus servidores." 8 Pero respecto del Hijo afirma: "Tu reinado, oh Dios, es eterno y es un reinado de justicia. 9 Has amado lo bueno y odiado lo malo; por eso te ha escogido Dios, tu Dios, y te ha colmado de alegría más que a tus compañeros." 10 También dice: "Tú, oh Señor, afirmaste la tierra desde el principio; tú mismo hiciste el cielo. 11 Todo ello dejará de ser, pero tú permaneces para siempre. Todo ello se envejecerá como la ropa, 12 ¡lo doblarás como se dobla un vestido, lo cambiarás como quien se cambia de ropa! Pero tú eres el mismo, tu vida no tiene fin."


 

Juan 1:1-14 (DHH-CP)

1 En el principio ya existía la Palabra, y aquel que es la Palabra estaba con Dios y era Dios. 2 Él estaba en el principio con Dios. 3 Por medio de él, Dios hizo todas las cosas; nada de lo que existe fue hecho sin él. 4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de la humanidad. 5 Esta luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no han podido apagarla. 6 Hubo un hombre llamado Juan, a quien Dios envió 7 como testigo, para que diera testimonio de la luz y para que todos creyesen por medio de él. 8 Juan no era la luz, sino uno enviado a dar testimonio de la luz. 9 La luz verdadera que alumbra a toda la humanidad venía a este mundo. 10 Aquel que es la Palabra estaba en el mundo, y aunque Dios había hecho el mundo por medio de él, los que son del mundo no le reconocieron. 11 Vino a su propio mundo, pero los suyos no le recibieron. 12 Pero a quienes le recibieron y creyeron en él les concedió el privilegio de llegar a ser hijos de Dios. 13 Y son hijos de Dios, no por la naturaleza ni los deseos humanos, sino porque Dios los ha engendrado. 14 Aquel que es la Palabra se hizo hombre y vivió entre nosotros lleno de amor y de verdad. Y hemos visto su gloria, la gloria que como Hijo único recibió del Padre.


 

[1]

[1] Sociedades Bíblicas Unidas, & Sociedad Bíblica de España. (2002; 2003). Dios habla hoy - Edición interconfesional de estudio (castellano peninsular); Dios habla hoy (castellano peninsular). Sociedade Bíblica do Brasil.

La Natividad de Ntro. Señor Jesucristo II (RCL)

Colectas: Oh Dios, tú nos alegras anualmente con la festividad del nacimiento de tu único Hijo Jesucristo: Concédenos que, así como le recibimos con júbilo como Redentor, de la misma manera le contemplemos con segura confianza cuando venga a ser nuestro Juez; quien vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.


 

o la siguiente:


 

Oh Dios, que has hecho resplandecer esta noche santa con la claridad de la Luz verdadera: Concede a los que hemos conocido el misterio de esa Luz en la tierra, que también nos gocemos de él plenamente, en el cielo; donde vive y reina contigo y el Espíritu santo, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.

o bien:


 

Omnipotente Dios, tú has dado a tu unigénito Hijo para asumir nuestra naturaleza, y nacer [este día] de una virgen pura: Concede que, siendo nacidos de nuevo y hechos tus hijos por adopción y gracia, seamos renovados cada día con tu Espíritu Santo; mediante nuestro Señor Jesucristo, a quien contigo y el mismo Espíritu sea el honor y la gloria, ahora y por siempre. Amén


 

Isaías 62:6-12 (DHH-CP)

6 Jerusalén, en tus murallas he puesto centinelas que de día y de noche dicen sin cesar: "Que no callen los que invocan al Señor, 7 que no lo dejen descansar hasta que haya reconstruido Jerusalén y haya hecho que todo el mundo la alabe." 8 El Señor ha jurado alzando su poderoso brazo derecho: "Nunca más permitiré que tus enemigos se coman tu trigo ni que los extranjeros se beban el vino que es fruto de tu trabajo, 9 sino que vosotros mismos recogeréis la cosecha, la comeréis y me alabaréis a mí; y vendimiraréis las uvas, y beberéis el vino en los atrios de mi santo templo." 10 Salid, salid por las puertas, preparad el camino para mi pueblo. Construid con cuidado la calzada y limpiadla de piedras; levantad la señal para llamar a las naciones. 11 El Señor anuncia esto hasta el extremo de la tierra: "Decidle a la ciudad de Sión que ha llegado ya su salvador. El Señor trae a su pueblo después de haberlo rescatado." 12 A los israelitas los llamarán "El pueblo santo", "Los liberados por el Señor", y a Jerusalén, "La ciudad deseada", "La ciudad no abandonada"

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Salmo 97 Dominus regnavit

1 El Señor es Rey; regocíjese la tierra; *

alégrense la multitud de las islas.

2 Nubes y oscuridad alrededor de él; *

rectitud y justicia el cimiento de tu trono.

3 Fuego va delante de él, *

y abrasa a sus enemigos alrededor.

4 Sus relámpagos alumbran el mundo; *

viéndolo, la tierra se estremece.

5 Los montes se derriten como cera a la vista del Señor, *

a la vista del Soberano de toda la tierra.

6 Los cielos anuncian su justicia, *

y todos los pueblos contemplan su gloria.

7 Avergüéncense todos los que adoran imágenes de talla, *

los que se glorían en dioses falsos; póstrense ante él, dioses todos.

8 Sión oye, y se alegra,y las ciudades de Judá se gozan, *

a causa de tus juicios, oh Señor;

9 Porque tú eres el Señor, altísimo sobre toda la tierra; *

eres muy excelso sobre todos los dioses.

10 El Señor ama a los que aborrecen el mal; *

él preserva la vida de sus santos, y de mano de los malvados los libra.

11 Brota la luz para el justo, *

y alegría para los rectos de corazón.

12 Alégrense, justos, en el Señor, *

dando gracias a su santo Nombre.\


 

Titos 3:4-7 (DHH-CP)

4 Pero Dios nuestro Salvador mostró su bondad y su amor por la humanidad, 5 y nos salvó, no porque nosotros hubiéramos hecho nada bueno, sino porque tuvo compasión de nosotros. Por medio del lavamiento nos ha hecho nacer de nuevo; por medio del Espíritu Santo nos ha dado nueva vida, 6 y por medio de nuestro Salvador Jesucristo nos ha dado el Espíritu Santo en abundancia, 7 para que, hechos justos por su bondad, recibamos la vida eterna que esperamos.


 

Lucas 2:1-20 (DHH-CP)

1 Por aquel tiempo, el emperador Augusto ordenó que se hiciera un censo de todo el mundo. 2 Este primer censo fue hecho siendo Quirinio gobernador de Siria. 3 Todos tenían que ir a inscribirse a su propia ciudad. 4 Por esto salió José del pueblo de Nazaret, de la región de Galilea, y se fue a Belén, en Judea, donde había nacido el rey David, porque José era descendiente de David. 5 Fue allá a inscribirse, junto con María, su esposa, que se encontraba encinta. 6 Y sucedió mientras estaban en Belén, que a María le llegó el tiempo de dar a luz. 7 Allí nació su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales y lo acostó en el pesebre, porque no había alojamiento para ellos en el mesón. 8 Cerca de Belén había unos pastores que pasaban la noche en el campo cuidando sus ovejas. 9 De pronto se les apareció un ángel del Señor, la gloria del Señor brilló alrededor de ellos y tuvieron mucho miedo. 10 Pero el ángel les dijo: "No tengáis miedo, porque os traigo una buena noticia que será motivo de gran alegría para todos: 11 Hoy os ha nacido en el pueblo de David un salvador, que es el Mesías, el Señor. 12 Como señal, encontraréis al niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre." 13 En aquel momento, junto al ángel, aparecieron muchos otros ángeles del cielo que alababan a Dios y decían: 14 "¡Gloria a Dios en las alturas! ¡Paz en la tierra entre los hombres que gozan de su favor!" 15 Cuando los ángeles se volvieron al cielo, los pastores comenzaron a decirse unos a otros: —Vamos, pues, a Belén, a ver lo que ha sucedido y que el Señor nos ha anunciado. 16 Fueron corriendo y encontraron a María, a José y al niño acostado en el pesebre. 17 Al verlo se pusieron a contar lo que el ángel les había dicho acerca del niño, 18 y todos los que lo oían se admiraban de lo que decían los pastores. 19 María guardaba todo esto en su corazón, y lo tenía muy presente. 20 Los pastores, por su parte, regresaron dando gloria y alabanza a Dios por todo lo que habían visto y oído, pues todo sucedió como se les había dicho.


 

[1] Sociedades Bíblicas Unidas, & Sociedad Bíblica de España. (2002; 2003). Dios habla hoy - Edición interconfesional de estudio (castellano peninsular); Dios habla hoy (castellano peninsular). Sociedade Bíblica do Brasil. Isaiah 62:6-12

Las porciones bíblicas son tomadas de La Biblia de estudio : Dios habla hoy. 1998 (electronic ed.). Miami: Sociedades Bı́iblicas Unidas. Todos los derechos reservados El texto de los salmos es tomado del Libro de Oración Común 1979 La Iglesia Episcopal. Algunas de las lecturas del Antiguo Testamento tiene un texto alterno con su propio salmo. Texto encerrado en [ ] es opcional. Texto en { } para hacer claro el texto que sigue.

La Natividad de Ntro. Señor Jesucristo I (RCL)

Colectas: Oh Dios, tú nos alegras anualmente con la festividad del nacimiento de tu único Hijo Jesucristo: Concédenos que, así como le recibimos con júbilo como Redentor, de la misma manera le contemplemos con segura confianza cuando venga a ser nuestro Juez; quien vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.

o la siguiente:


 

Oh Dios, que has hecho resplandecer esta noche santa con la claridad de la Luz verdadera: Concede a los que hemos conocido el misterio de esa Luz en la tierra, que también nos gocemos de él plenamente, en el cielo; donde vive y reina contigo y el Espíritu santo, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.


 

o bien:


 

Omnipotente Dios, tú has dado a tu unigénito Hijo para asumir nuestra naturaleza, y nacer [este día] de una virgen pura: Concede que, siendo nacidos de nuevo y hechos tus hijos por adopción y gracia, seamos renovados cada día con tu Espíritu Santo; mediante nuestro Señor Jesucristo, a quien contigo y el mismo Espíritu sea el honor y la gloria, ahora y por siempre. Amén


 

La Colecta que precede, y cualquiera de las tres series de Lecciones Propias del Día de Navidad, sirven para cualquier otro día de entre semana desde el Día de los Santos Inocentes hasta el Primer Domingo después del Día de Navidad.

Isaías 9:2-7 (DHH-CP)

2 El pueblo que andaba en la oscuridad vio una gran luz; una luz ha brillado para los que vivían en tinieblas. 3 Señor, has traído una gran alegría; muy grande es el gozo. Todos se alegran delante de ti como en tiempo de cosecha, como se alegran los que se reparten grandes riquezas. 4 Porque tú has destruido la esclavitud que oprimía al pueblo, la opresión que lo afligía, la tiranía a que estaba sometido. Fue como cuando destruiste a Madián. 5 Las botas que hacían resonar los soldados, y los vestidos manchados de sangre, serán quemados, destruidos por el fuego. 6 Porque nos ha nacido un niño, Dios nos ha dado un hijo, al cual se le ha concedido el poder de gobernar. Y le darán estos nombres: Admirable en sus planes, Dios invencible, Padre eterno, Príncipe de la paz. 7 Se sentará en el trono de David; extenderá su poder real a todas partes y la paz no se acabará; su reinado quedará bien establecido, y sus bases serán la justicia y el derecho desde ahora y para siempre. Esto lo hará el ardiente amor del Señor todopoderoso.


 

Salmo 96 Cantate Domino

1 Canten al Señor cántico nuevo;*

canten al Señor, toda la tierra.

2 Canten al Señor, bendigan su Nombre; *

proclamen de día en día su victoria.

3 Pregonen entre las naciones su gloria, *

en todos los pueblos sus maravillas;

4 Porque grande es el Señor, y muy digno de alabanza; *

más temible es que todos los dioses;

5 Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos; *

pero es el Señor que ha hecho los cielos.

6 ¡Oh, la majestad y la magnificencia de su presencia! *

¡Oh, la fuerza y el esplendor de su santuario!

7 Rindan al Señor, oh familias de los pueblos, *

rindan al Señor la honra y el poder.

8 Rindan al Señor la gloria debida a su Nombre; *

traigan ofrendas, y entren en sus atrios.

9 Adoren al Señor en la hermosura de la santidad; *

tiemble delante de él toda la tierra.

10 Pregonen entre las naciones: "El Señor es Rey; *

de tal manera ha afirmado el orbe que no será conmovido; juzgará a los pueblos con equidad".

11 Alégrense los cielos, y gócese la tierra; truene la mar y su plenitud; *

regocíjese el campo, y todo lo que en él está.

12 Entonces aclamarán con júbilo todos los árboles del bosque,

delante del Señor cuando llegue, *

cuando llegue a juzgar la tierra.

13 Juzgará al mundo con justicia, *

y a los pueblos con SU verdad.


 

Tito 2:11-14 (DHH-CP)

11 Dios nos ha mostrado su bondad, que trae la salvación a toda la humanidad. 12 Esa bondad de Dios nos enseña a dejar la maldad y los deseos mundanos y a llevar en este mundo una vida de moderación, rectitud y devoción a Dios, 13 mientras esperamos el feliz cumplimiento de aquello que se nos ha prometido, el regreso glorioso de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo. 14 Él se entregó a la muerte por nosotros, para salvarnos de toda maldad y limpiarnos totalmente, para que seamos suyos, deseosos de hacer el bien.


 

Lucas 2:1-14 (DHH-CP)

1 Por aquel tiempo, el emperador Augusto ordenó que se hiciera un censo de todo el mundo. 2 Este primer censo fue hecho siendo Quirinio gobernador de Siria. 3 Todos tenían que ir a inscribirse a su propia ciudad. 4 Por esto salió José del pueblo de Nazaret, de la región de Galilea, y se fue a Belén, en Judea, donde había nacido el rey David, porque José era descendiente de David. 5 Fue allá a inscribirse, junto con María, su esposa, que se encontraba encinta. 6 Y sucedió mientras estaban en Belén, que a María le llegó el tiempo de dar a luz. 7 Allí nació su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales y lo acostó en el pesebre, porque no había alojamiento para ellos en el mesón. 8 Cerca de Belén había unos pastores que pasaban la noche en el campo cuidando sus ovejas. 9 De pronto se les apareció un ángel del Señor, la gloria del Señor brilló alrededor de ellos y tuvieron mucho miedo. 10 Pero el ángel les dijo: "No tengáis miedo, porque os traigo una buena noticia que será motivo de gran alegría para todos: 11 Hoy os ha nacido en el pueblo de David un salvador, que es el Mesías, el Señor. 12 Como señal, encontraréis al niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre." 13 En aquel momento, junto al ángel, aparecieron muchos otros ángeles del cielo que alababan a Dios y decían: 14 "¡Gloria a Dios en las alturas! ¡Paz en la tierra entre los hombres que gozan de su favor!"[15 Cuando los ángeles se volvieron al cielo, los pastores comenzaron a decirse unos a otros: —Vamos, pues, a Belén, a ver lo que ha sucedido y que el Señor nos ha anunciado. 16 Fueron corriendo y encontraron a María, a José y al niño acostado en el pesebre. 17 Al verlo se pusieron a contar lo que el ángel les había dicho acerca del niño, 18 y todos los que lo oían se admiraban de lo que decían los pastores. 19 María guardaba todo esto en su corazón, y lo tenía muy presente. 20 Los pastores, por su parte, regresaron dando gloria y alabanza a Dios por todo lo que habían visto y oído, pues todo sucedió como se les había dicho.]

[1] Sociedades Bíblicas Unidas, & Sociedad Bíblica de España. (2002; 2003). Dios habla hoy - Edición interconfesional de estudio (castellano peninsular); Dios habla hoy (castellano peninsular). Sociedade Bíblica do Brasil.

Las porciones bíblicas son tomadas de La Biblia de estudio : Dios habla hoy. 1998 (electronic ed.). Miami: Sociedades Bı́iblicas Unidas. Todos los derechos reservados El texto de los salmos es tomado del Libro de Oración Común 1979 La Iglesia Episcopal. Algunas de las lecturas del Antiguo Testamento tiene un texto alterno con su propio salmo. Texto encerrado en [ ] es opcional. Texto en { } para hacer claro el texto que sigue.


 

Cuarto Domingo de Adviento Año B (RCL)

Colecta

Colecta:
Dios todopoderoso, te suplicamos que purifiques nuestra conciencia con tu visitación diaria, para que, cuando venga tu Hijo Jesucristo, encuentre en nosotros la mansión que le ha sido preparada; quien vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.


 

2 Samuel 7:1-11 (DHH-CP)

1 Cuando el rey David estaba ya instalado en su palacio, y el Señor le había concedido la paz con todos sus enemigos de alrededor, 2 dijo a Natán, el profeta: —Como puedes ver, yo vivo en un palacio de cedro, mientras que el arca de Dios está en medio de simples cortinas. 3 Natán le contestó: —Pues haz todo lo que te has propuesto, porque cuentas con el apoyo del Señor. 4 Pero aquella misma noche, el Señor se dirigió a Natán y le dijo: 5 "Ve y habla con mi siervo David, y comunícale que yo, el Señor, he dicho: 'No serás tú quien me construya un templo para que habite en él. 6 Desde el día en que saqué de Egipto a los israelitas, hasta el presente, nunca he habitado en templos, sino que he andado en simples tiendas de campaña. 7 En todo el tiempo que anduve con ellos, jamás pedí a ninguno de sus caudillos, a quienes puse para que gobernaran a mi pueblo Israel, que me construyera un templo de madera de cedro.' 8 Por lo tanto, dile a mi siervo David que yo, el Señor todopoderoso, le digo: 'Yo te saqué del redil y te quité de andar tras el rebaño para que fueras el jefe de mi pueblo Israel; 9 te he acompañado por dondequiera que has ido, he acabado con todos los enemigos que se te enfrentaron y te he dado gran fama, como la que tienen los hombres importantes de este mundo. 10 Además he preparado un lugar para mi pueblo Israel, y allí los he instalado para que vivan en un sitio propio, donde nadie los moleste ni los malhechores los opriman como al principio, 11 cuando puse caudillos que gobernaran a mi pueblo Israel. Yo haré que te veas libre de todos tus enemigos. Y te hago saber que te daré descendientes, 16 Tu dinastía y tu reino estarán para siempre seguros bajo mi protección, y también tu trono quedará establecido para siempre.'


 

15 Cántico de María Magnificat

San Lucas 1:46-55

Proclama mi alma la grandeza del Señor,

se alegra mi espíritu en Dios mi Salvador, *

porque ha mirado la humillación de su esclava.

Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, *

porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí;

su Nombre es santo.

Su misericordia llega a sus fieles, *

de generación en generación.
El hace proezas con su brazo; *

dispersa a los soberbios de corazón.

Derriba del trono a los poderosos, *

y enaltece a los humildes.

A los hambrientos los colma de bienes, *

y a los ricos despide vacíos.

Auxilia a Israel, su siervo, *

acordándose de la misericordia,

Como lo había prometido a nuestros padres, *

en favor de Abrahán y su descendencia para siempre.

Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo: *

como era en el principio, ahora y siempre,

por los siglos de los siglos. Amén.


 

O este


 

Salmo 89:1-4, 19-26 Misericordias Domini

1 Tu amor, oh Señor, cantaré perpetuamente; *

de generación en generación

anunciará mi boca tu fidelidad;

2 Porque seguro estoy que tu amor es para siempre; *

en los cielos has afirmado tu fidelidad.

3 "Hice pacto con mi escogido; *

juré a David mi siervo, diciendo:

4 'Para siempre confirmaré tu linaje, *

y edificaré tu trono por todas las generaciones'".

19 Hablaste una vez a tus fieles en una visión, y dijiste: *

"He puesto la corona sobre un héroe;

he levantado a un escogido del pueblo.

20 Hallé a David mi siervo; *

lo ungí con mi óleo sagrado.

21 Mi mano estará siempre con él; *

mi brazo también lo fortalecerá.

22 No lo engañará ningún enemigo, *

ni cualquier malvado lo humillará.

23 Aplastaré delante de él a sus enemigos *

y heriré a los que le aborrecen.

24 Mi amor y fidelidad lo acompañarán, *

y por mi Nombre será victorioso.

25 Pondré su izquierda sobre el mar, *

y su diestra sobre el río.

26 El me invocará: 'Tú eres mi Padre, *

mi Dios, y la roca de mi salvación


 

Romanos 16:25-27 (DHH-CP)

25 Alabemos al Señor, que puede haceros firmes conforme al evangelio que yo anuncio y la enseñanza acerca de Jesucristo. Esto está de acuerdo con lo que Dios ha revelado de su designio secreto, oculto desde antes que el mundo existiera, 26 pero dado ahora a conocer por los escritos de los profetas, según el mandato del Dios eterno. Este secreto del plan de Dios se ha dado a conocer a todas las naciones, para que crean y obedezcan. 27 ¡A Dios, el único sabio, sea la gloria para siempre por medio de Jesucristo! Amén.


 

Lucas 1:26-38 (DHH-CP)

26 A los seis meses envió Dios al ángel Gabriel a un pueblo de Galilea llamado Nazaret, 27 a visitar a una joven virgen llamada María que estaba comprometida para casarse con un hombre llamado José, descendiente del rey David. 28 El ángel entró donde ella estaba, y le dijo: —¡Te saludo, favorecida de Dios! El Señor está contigo. 29 Cuando vio al ángel, se sorprendió de sus palabras, y se preguntaba qué significaría aquel saludo. 30 El ángel le dijo: —María, no tengas miedo, pues tú gozas del favor de Dios. 31 Ahora vas a quedar encinta: tendrás un hijo y le pondrás por nombre Jesús. 32 Será un gran hombre, al que llamarán Hijo del Dios altísimo: y Dios el Señor lo hará rey, como a su antepasado David, 33 y reinará por siempre en la nación de Israel. Su reinado no tendrá fin. 34 María preguntó al ángel: —¿Cómo podrá suceder esto, si no vivo con ningún hombre? 35 El ángel le contestó: —El Espíritu Santo se posará sobre ti y el poder del Dios altísimo se posará sobre ti como una nube. Por eso, el niño que va a nacer será llamado Santo e Hijo de Dios. 36 También tu parienta Isabel, a pesar de ser anciana, va a tener un hijo; la que decían que no podía tener hijos está encinta desde hace seis meses. 37 Para Dios no hay nada imposible. 38 Entonces María dijo: —Soy la esclava del Señor. ¡Que Dios haga conmigo como me has dicho! Con esto, el ángel se fue.


 

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[1] Sociedades Bíblicas Unidas, & Sociedad Bíblica de España. (2002; 2003). Dios habla hoy - Edición interconfesional de estudio (castellano peninsular); Dios habla hoy (castellano peninsular). Sociedade Bíblica do Brasil.

Las porciones bíblicas son tomadas de La Biblia de estudio : Dios habla hoy. 1998 (electronic ed.). Miami: Sociedades Bı́iblicas Unidas. Todos los derechos reservados El texto de los salmos es tomado del Libro de Oración Común 1979 La Iglesia Episcopal. Algunas de las lecturas del Antiguo Testamento tiene un texto alterno con su propio salmo. Texto encerrado en [ ] es opcional. Texto en { } para hacer claro el texto que sigue.